Este reportaje es parte del Hub de Periodismo de Investigación de la Frontera Norte, un proyecto del International Center for Journalists en alianza con el Border Center for Journalists and Bloggers
Aunque la empresa regiomontana PASA ha recibido multas y señalamientos por deficiencias en su servicio de recolección de basura en Torreón, además de que ha incumplido con compromisos establecidos en el contrato debido a que los consideraban inviables, año con año sus tarifas suben entre el 8 y 13 por ciento y en los últimos 12 años esto ha significado una ganancia de 2 mil 130 millones 498 mil 595 pesos para la empresa, de acuerdo con información obtenida por transparencia y entrevistas a funcionarios.
En 2011, Promotora Ambiental S.A. de C.V. (PASA) y el Municipio de Torreón firmaron el contrato que se encuentra vigente para concesionar el servicio de recolección de basura por 15 años, en donde estipularon diversos compromisos que prometían traer beneficios económicos para el Ayuntamiento, como lo es la implementación de una planta de biogás y otra de separación de residuos sólidos.
En estos últimos 12 años, la empresa no ha llevado a cabo estos compromisos por considerarlos inviables financieramente, aunque durante este tiempo ha incrementado 129 por ciento sus ingresos, al pasar de 113.8 millones de pesos en 2011 a 260.4 millones de pesos en 2022, de acuerdo con información obtenida por transparencia.
Pero el Municipio no sólo no ha visto los beneficios económicos prometidos, sino que además, los altos costos de operación de PASA han llevado al Ayuntamiento a absorber parte de las funciones que le tocan a la empresa para ahorrarse costos.
La actual administración municipal encabezada por Román Alberto Cepeda erogó 71.5 millones de pesos, del 2022 hasta mayo de este año, en el programa La Ola, mediante el cual el Ayuntamiento complementa el barrido manual con 637 empleados municipales, a pesar de que esa labor forma parte de las acciones que PASA debe llevar a cabo para mantener limpia la ciudad, de acuerdo con el convenio.
Fernando Villarreal Cuéllar, director de Servicios Públicos, explicó que el Municipio absorbe esta función porque la tarifa que cobra la concesionaria por un kilómetro de barrido manual es suficiente para pagar a tres empleados de La Ola.
Aún así, la empresa ha aumentado su tarifa en los últimos años. En enero de 2022, año en que entró en funciones el actual alcalde Román Alberto Cepeda, el Ayuntamiento dio a conocer que PASA había incrementado 12 por ciento sus tarifas.
De acuerdo con una nota periodística publicada en Milenio en abril de ese año, el tesorero municipal, Óscar Luján Fernández, dijo que se trataba de un aumento excesivo e informó que se encontraban en una mesa de negociación con la empresa con la finalidad de lograr una reconsideración, misma que no fue posible.
El Municipio pidió entonces al Congreso del Estado de Coahuila la conformación de una comisión especial para el estudio, análisis y atención del funcionamiento de la concesión, misma que fue aprobada el 3 de mayo de 2022. Si bien dicha comisión fue creada en los días posteriores, hasta la fecha no ha sesionado.
Este año PASA volvió a subir sus tarifas, esta vez 13 por ciento, según consignaron medios locales.
El equipo de Plaza Pública acudió a las oficinas de PASA en Torreón el pasado 17 de noviembre para buscar la postura de la empresa en torno a esta investigación, pero se nos negó el acceso, primero por parte del personal de seguridad, y posteriormente por la encargada de capital humano, quien argumentó que en ese momento no había nadie que pudiera atender la entrevista o recibir la solicitud por escrito de la misma. Este medio también intentó contactar al gerente general de PASA en Torreón vía telefónica y WhatsApp, pero hasta el cierre de esta edición no había respondido.
Multan a PASA
Entre enero y abril de este 2023, el Municipio multó por 204 mil 898 pesos a PASA, de acuerdo con la respuesta a la solicitud con folio 051260800017423.
En una nota publicada en El Siglo de Torreón en mayo pasado, el tesorero municipal, Óscar Luján Fernández, señaló que algunas observaciones que le han realizado a la empresa son porque tiran o se les cae basura en su camino al relleno sanitario, y se han hecho descuentos por incumplimiento en el barrido de algunos tramos de la ciudad.
En su contestación, el Ayuntamiento explicó que las sanciones económicas se aplican como descuento: “Cada mes se rebaja el kilometraje y el servicio de recolección de carga trasera en donde se valora las fallas que tuvo la empresa PASA”, dice el documento firmado por Demetrio Zúñiga Sordo, director de Limpieza.
Fernando Villarreal Cuéllar, director de Servicios Públicos Municipales de Torreón, dijo que todos los días llegan quejas por fallas en el servicio de PASA, la mayoría de ellas porque no pasa el camión o porque no se llevan todas las bolsas.
Torreón no es la única ciudad donde PASA ha sido multada por fallas en el servicio, en Ciudad Juárez, Chihuahua, por ejemplo, el Cabildo le impuso dos multas por más de 3 millones de pesos en total durante la presente administración de Cruz Pérez Cuéllar (2021-2024) por fallas como el incumplimiento de los recorridos de los camiones recolectores, y al término del contrato el pasado mes de septiembre no lo renovó, sino que lanzó una nueva licitación, de acuerdo con notas periodísticas publicadas en Yo Ciudadano.
Prefieren absorber barrido manual que pagarle más a PASA
Las respuestas a las solicitudes de información 0051260800003823 y 051260800017423 permiten observar que en 2022 el Ayuntamiento de Torreón pagó 259 millones de pesos a PASA por sus servicios, sin embargo, en ese mismo período tuvo que invertir otros 37.2 millones de pesos para pagarle al personal del programa La Ola para que realizara una parte del barrido manual de la ciudad, labor que según el contrato está entre las funciones de la concesionaria.
Fernando Villarreal Cuéllar, director de Servicios Públicos Municipales de Torreón, explicó que el barrido manual de PASA se utiliza al mínimo porque sus costos son elevados.
“Es más barato y más efectivo dejar lo menor posible el contrato de PASA y nosotros contratar”, aseguró Villarreal Cuéllar.
Hasta mediados de este año, las erogaciones de la actual administración en el programa La Ola sumaban 71.5 millones de pesos, tomando en cuenta el citado pago de personal del año pasado, 18.1 millones de pesos por el mismo concepto en este 2023 hasta mayo y 16.2 millones de pesos utilizados para la adquisición de vehículos, instrumentos de limpieza, uniformes y equipo.
Aunque el programa La Ola le permite al Ayuntamiento ahorrar en el barrido manual, de todos modos tiene que pagarle a PASA por depositar los residuos recolectados en el relleno sanitario.
Un buen negocio para PASA
La empresa regiomontana PASA obtuvo la concesión del servicio de limpieza en Torreón hace 29 años, sólo tres años después de su fundación. En 1994 el entonces presidente municipal de Torreón, Mariano López Mercado, y Alberto Eugenio Garza Santos, representante legal de la empresa, firmaron el convenio por 15 años.
Después, en febrero de 2011, durante la administración encabezada por Eduardo Olmos Castro, el municipio otorgó a la empresa una prórroga de 15 años para prestar el servicio de limpieza en la ciudad, lo que le aseguró la continuidad de su negocio y la estabilidad a largo plazo.
En 12 de los 15 años que contempla la prórroga del convenio de PASA con el Ayuntamiento de Torreón, la concesionaria ha ganado 2 mil 130 millones 498 mil 595 pesos.
Para ponerlo en perspectiva, en Ciudad Juárez, Chihuahua, donde el servicio se encareció hasta 200 por ciento, la concesión le representó a PASA un negocio de 3 mil 542 millones 797 mil 674 pesos durante los 17 años que duró su contrato, según la investigación de Yo Ciudadano.
La nota detalla que en la ciudad fronteriza la cantidad de basura que ingresa al relleno sanitario alcanzó su nivel máximo en 2021 con 446 mil 008 toneladas.
En ese mismo año en Torreón ingresaron 213 mil 337 toneladas, de acuerdo con los datos contenidos en la respuesta a la solicitud 0051260800035922, efectuada en septiembre de 2022 por el ciudadano Pedro Ramírez Ramírez y disponible en la Plataforma Nacional de Transparencia.
En Torreón la factura de PASA crece año con año porque la empresa actualiza sus tarifas con base en el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC).
“Hay una fórmula que habla de la inflación, del salario mínimo, del precio del combustible y del Índice Nacional de Precios al Consumidor que nos lleva cada año a que suba la factura. Los dos principales insumos son el combustible y la mano de obra, para el barrido manual y la recolección. Por eso cada año la facturación sube entre el 8 y el 13 por ciento”, explicó Fernando Villarreal Cuéllar, director de Servicios Públicos Municipales de Torreón.
Cabe señalar que el contrato original, firmado en agosto de 1994, incluía una cláusula (la trigésimo primera) que abría la posibilidad a negociar la tarifa en caso de rebasar el tonelaje recolectado. Se estableció un tonelaje base de 400 toneladas diarias, y si la cantidad prevista era superada en más de un 10 por ciento, concesionaria y Municipio debían sentarse a negociar para acordar la infraestructura necesaria y los pagos procedentes.
Dicha cláusula fue eliminada del contrato de prórroga autorizado en 2011, lo que le ha permitido a PASA definir sus tarifas unilateralmente, sin negociar pagos con el municipio y utilizando como base la fórmula antes mencionada.
A mediados de 2009, el Ayuntamiento torreonense, con José Ángel Pérez como alcalde, anunció que no renovaría la concesión de PASA sino que haría una nueva licitación.
Pedro Ávila, entonces primer regidor, declaró a medios de comunicación que se tenía la oportunidad de otorgar una concesión ventajosa para el municipio.
Tras el anuncio, PASA recurrió al amparo, ya que en agosto de 2007 la concesionaria había solicitado una prórroga de los servicios concesionados por un plazo igual al otorgado de manera inicial, pero el Ayuntamiento nunca le respondió.
En octubre de 2009, el Juzgado Cuarto de Distrito en la Laguna, decidió conceder el amparo a la concesionaria para que el Ayuntamiento de Torreón le otorgara una prórroga por 15 años más a la empresa, en los mismos términos y condiciones que se pactaron en el contrato original.
Las autoridades municipales se inconformaron con el fallo del juez e interpusieron un recurso de revisión en contra, el cual fue turnado para su estudio y resolución al Primer Tribunal Colegiado en Materia Penal y Administrativa del Octavo Circuito.
La administración de José Ángel Pérez concluyó sin que el asunto se resolviera y fue hasta febrero de 2011 que la administración de Eduardo Olmos Castro (2010-2013) prorrogó el convenio con la empresa tras analizar el caso.
El Municipio adujo, según consta en el dictamen de la Comisión de Gobernación municipal, que la decisión era “provechosa” para la ciudadanía de Torreón, ya que se consiguió un “descuento considerable” del 15 por ciento en las tarifas de la concesionaria.
Sin embargo, la prórroga concedida estuvo condicionada por el proceso judicial, ya que la administración de Olmos Castro consideró que si los tribunales fallaban contra el municipio, la autoridad torreonense se quedaría sin margen de maniobra para negociar con la empresa.
Otro de los beneficios obtenidos por PASA desde la negociación de la prórroga, además del concerniente a la tarifa, tiene que ver con la propiedad del relleno sanitario.
La cláusula décima del contrato de 1994 estipulaba el otorgamiento en comodato a la concesionaria los bienes inmuebles con que se prestaba el servicio en ese momento, sin crear ningún derecho real en favor de ésta. Más adelante, en la cláusula vigésimo tercera, se detalla entre las obligaciones del Municipio proporcionar, también en comodato, un sitio para un nuevo relleno sanitario.
En el convenio de prórroga de 2011, la cláusula quinta determina que al término de la vigencia del contrato los bienes muebles e inmuebles con que presta el servicio la concesionaria pasarán a ser propiedad del Municipio sin costo alguno, “con excepción del inmueble que se encuentra ubicado en el Municipio de Matamoros Coahuila y que en la actualidad es operado por la Concesionaria como relleno Sanitario, el cual queda bajo la propiedad, posesión y responsabilidad absoluta de la Concesionaria”.
De acuerdo con Rodolfo Walss Aurioles, diputado local, el hecho de que Torreón haya renunciado a esa propiedad le permite a la empresa cobrar tarifas por la disposición final de los residuos, en lugar de pagar renta por el uso de las instalaciones.
“Cuando termina una concesión, todos los equipos adquiridos, en este caso los camiones de basura, las tolvas, los contenedores, todo, todo, así como el relleno sanitario, debió haber pasado a manos del Municipio, pero cuando se renovó la concesión, el Municipio (…) renunció a esa propiedad y le regaló a PASA toda esa infraestructura”, expuso Walss Aurioles.
Además, en el convenio firmado en 1994, el Municipio acordó con PASA una tarifa por la disposición final de los desperdicios que ayudara a la empresa a recuperar el dinero invertido en la construcción del relleno sanitario, toda vez que al final de la concesión el terreno sería propiedad del municipio. En el segundo convenio, ese costo de recuperación ya no tendría que estar presente en la tarifa, señaló el diputado.
“Por eso los números no dan. Estamos pagando la disposición de basura sobre un terreno que debería ser de los torreonenses (…), la tarifa debería ser mucho menor a la que se viene cobrando año con año”, declaró el hoy legislador morenista.
Walss Aurioles fue secretario del Ayuntamiento en tiempos de José Ángel Pérez, es decir, estuvo en la primera línea de aquella administración que prometió negociar una concesión ventajosa para el Municipio. También fue regidor de oposición, por el PAN, durante la administración de Eduardo Olmos Castro, durante la que finalmente se acordó la prórroga.
Los beneficios prometidos y no cumplidos
En 2010, cuando el Municipio negociaba la prórroga del convenio con PASA, el entonces secretario del Ayuntamiento, Miguel Mery Ayup, habló de dos proyectos que se incluirían como obligación de PASA en el contrato de prórroga y que se traducirán en beneficios para Torreón: una planta de generación de biogás y una planta de reciclaje.
De acuerdo con las declaraciones del funcionario, la concesionaria otorgaría al Municipio un 50 por ciento anual de las ganancias que obtuviera por el aprovechamiento del biogás, así como un 8 por ciento de la utilidad anual por el reciclado de la basura.
En el contrato, lo concerniente a la generación de biogás y el reparto de los beneficios quedó estipulado en el apartado B de la cláusula vigésima, pero condicionado a que la evaluación del proyecto fuera considerada positiva por ambas partes.
Susana Estens de la Garza, directora de Medio Ambiente de Torreón, comentó que, durante la administración municipal de Miguel Riquelme (2014-2016), PASA presentó una propuesta para aprovechar el gas y generar electricidad.
Sin embargo, no resultó rentable. Además, por las mismas fechas empezó a cobrar forma el Parque Solar Villanueva en el municipio de Viesca, de manera que aprovechar el biogás perdió atractivo.
“Sin embargo, el potencial ahí está”, comentó la directora de Medio Ambiente.
Por su parte, Rodolfo Walss Aurioles, diputado local, consideró que el relleno sanitario está construido de tal manera que tiene la posibilidad de captar el biogás y de explotarlo.
“Ese biogás debería ser propiedad del Municipio porque el Municipio debería ser el dueño del terreno”, expuso el diputado de Morena.
En diciembre de 2018, PASA propuso al Municipio un servicio de autoabastecimiento de electricidad mediante una planta de biogás. El Ayuntamiento, a través de Hernán Sirgo Ortiz, en ese entonces tesorero municipal, rechazó la oferta porque el ahorro que representaba para el municipio era muy bajo.
En marzo de 2019, PASA anunció la construcción de plantas de generación de electricidad a través de biogás en León (Guanajuato), Tijuana (Baja California) y Torreón. En los dos primeros casos, la empresa convino vender la energía a los municipios donde se ubican las instalaciones; en el de Torreón, PASA planeaba enviar la electricidad al centro del país, probablemente a Puebla, de acuerdo con una nota periodística publicada por El Financiero en 2019.
A través de la solicitud de información con folio 051260800017423 Plaza Pública pidió al Ayuntamiento datos relacionados tanto con el proyecto de la planta recicladora como de la planta de biogás: ¿en qué estatus van? ¿Se han hecho análisis de viabilidad? ¿Se ha invertido en algún proyecto piloto?, fueron algunas de las preguntas.
“El proyecto de biogás y generación de energía está detenido por una autorización de la CRE, por lo tanto está en pausa este proyecto hasta obtener la autorización, se tiene previsto un triturador y reciclaje de neumáticos, aún no se realiza el estudio de viabilidad”, dice la respuesta del Municipio.
Con respecto al proyecto de la planta de reciclaje que le aportaría el 8 por ciento de sus utilidades al Ayuntamiento, quedó asentado en el apartado A de la cláusula vigésima del convención de prórroga que PASA no está obligada a operarla si no es rentable, “lo anterior previo a un estudio técnico, operativo, financiero y objetivo que realicen las partes”, puntualiza el contrato.
Además, el 8 por ciento no era por utilidades, como dijo Mery Ayup. En el convenio de prórroga se estableció que del volumen total de residuos urbanos ingresados a la planta segregadora, ese porcentaje sería restado a las facturas por concepto de disposición final de la concesionaria.
De acuerdo con Susana Estens de la Garza, directora de Medio Ambiente de Torreón, el único intento por probar la viabilidad de la planta de reciclaje data de 2015, cuando PASA montó una planta segregadora de residuos sólidos con capacidad para procesar 800 toneladas diarias de basura a fin de recuperar los materiales reciclables enviados al relleno sanitario.
Aquella instalación, declaró la funcionaria, no arrojó los rendimientos esperados, según los reportes presentados por PASA.
“Ellos pretendían que se recuperara mínimo el 8 por ciento del valor total que fuera (de la inversión) en reciclables, pero no resultó la inversión. Tenían inversionistas extranjeros que decidieron retirarse, desmontaron la planta segregadora y ya no la volvieron a hacer”, expuso Estens de la Garza.
La funcionaria añadió que si bien el Municipio no tiene datos precisos sobre la rentabilidad de una planta de ese tipo, se sabe que los reciclables tienen un buen precio. “Por eso, y por razones de índole socioecónomica, vemos a tanta gente que se dedica a la pepena”, dijo.
La ciudad genera, en promedio, alrededor de 575 toneladas de basura diariamente, de acuerdo con los datos contenidos en la respuesta a la solicitud 0051260800035922.
Educación ambiental inexistente
La única compensación de tipo económico que PASA ha proporcionado con base en el contrato original de hace 29 años es la de entregar el 0.5 por ciento de los ingresos brutos cobrados al municipio que, de acuerdo con el contrato debe emplearse para elevar la cultura de limpieza y de protección al medio ambiente.
Ese recurso también muestra cómo han aumentado las erogaciones en la concesión de limpieza. En 2011, ese 0.5 por ciento ascendió a 552 mil 615 pesos; en 2020, significó una aportación de un millón 302 mil 174 pesos.
Una de las primeras decisiones que tomó Susana Estens al frente de la Dirección de Medio Ambiente fue solicitar a la Tesorería Municipal que el dinero de PASA destinado a educación ambiental sea asignado directamente a programas de corte ecológico. Según la funcionaria, ha pasado que Tesorería hace “magia”:
“Si no lo solicitas directamente, ellos te pueden decir que lo están canalizando a través del presupuesto de la dependencia para su área de programas, lo cual no es una mentira; lo que yo estoy pidiendo es que ese recurso sea asignado aparte del presupuesto de la dirección, según lo que vayamos presentando. Si se mete en la licuadora, luego hay la tentación de utilizarlo en otros programas. Es responsabilidad de la Dirección de Medio Ambiente exigir ese recurso”, explicó.
Este año, compartió, parte del recurso de PASA ha sido empleado en la edición de un libro para colorear, con información sobre la flora y la fauna de la región, que será repartido a escolares del municipio. Sin embargo, la funcionaria reconoció que el aporte de la empresa no se aprovecha en todo su potencial.
Plaza Pública pidió a través de la solicitud de información 051260800017423 al Municipio un reporte sobre campañas de concientización ambiental con montos de inversión desde la prórroga de la concesión a la fecha, pero la autoridad se limitó a enviar un listado de ocho iniciativas de limpieza correspondientes únicamente a la presente administración y sólo de una específica la inversión de 6 mil 500 pesos.
El convenio de prórroga estará vigente hasta 2025 y de acuerdo con la cláusula cuarta, si PASA desea una nueva prórroga, deberá presentar su solicitud por escrito con una anticipación no menor de dos años al término de la vigencia, es decir, tuvo que haberla presentado en marzo de 2023, pero hasta el momento el Ayuntamiento no ha dado a conocer nada al respecto.