La problemática del huachicol ha generado miedo e incertidumbre entre los habitantes de Querétaro, particularmente en San Juan del Río. Las tomas clandestinas han provocado tragedias, mientras que la falta de preparación de las autoridades y la presencia del crimen organizado agravan la situación. En 2023, se registró un récord de tomas clandestinas, con un impacto económico significativo. Los pobladores, cada vez más consciente del problema, prefiere guardar silencio.
Florentino
–San Juan del Río no estaba preparado para abordar un tema de huachicol de esa magnitud, no había la preparación táctica y técnica para abordar el tema –reprocha Florentino–. Incluso una de las tomas de gas terminó en tragedia, la del Barrio de La Cruz, que nuestra compañera Ana… a mí me agarró a medio camino, fue en la madrugada.
San Juan del Río no estaba preparado para eso, que lo que llegó a pasar en el Barrio de la Cruz… y que volvió a pasar en 2018 donde la esposa, la hija y el policía… –dice Florentino (nombre cambiado por seguridad), quien por varios años estuvo dentro de corporaciones policiales de Querétaro, en diferentes municipios, y actualmente trabaja en el estado y en otros más para prevenir la violencia.
2016, explosión en el Barrio de La Cruz
Doña Rosy dice que recuerda que fue hace tiempo, hace ocho años, ellos estaban durmiendo; fue olor a gas, una pequeña llamarada, una fuga, la evacuación y entonces la explosión.
Pero incluso ahora, después de tanto tiempo… Un muchacho creó un chat de vecinos, hay veces en que la gente aún se espanta, aún tienen miedo, aún no puedes dormir tranquila, mandan y mandan mensajes a los grupos por cualquier olor a gas.
“Si mira, es que aquí pasan los ductos, pues justo allí abajo de esa camioneta, en medio de la calle pavimentada, es donde están los ductos y eso que por aquí mismo está la escuela. Había un túnel por debajo de la calle que llevaba hasta allá y en aquella bodega lo sacaban; lo bueno que dicen que no explotó la pipa grande”.
Aquella bodega, ubicada en la esquina de las calles Chabacano y Olivos, en la comunidad del barrio de La Cruz, muy cerca de la terminal de autobuses de este municipio que colinda con Estado de México e Hidalgo, en la cual cuatro pipas abastecidas ilegalmente de gas LP explotaron al interior. El hidrocarburo fue extraído de una toma clandestina oculta en el predio.
Las tomas clandestinas no eran novedad para San Juan del Río: entre 2016 y 2018, 562 tomas fueron localizadas por la empresa Petróleos Mexicanos (Pemex), esto según cifras oficiales presentadas en dos solicitudes de información.
Tampoco era nuevo que robaran gas. En 2017, el año donde más combustible aseguró Pemex en tomas clandestinas ubicadas a lo largo de San Juan del Río, de los casi 135 mil litros asegurados, 60 mil pertenecían a gas LP.
Lo que era una inminente novedad es que una explosión tuviera lugar, una que dio como resultado la evacuación de 42 viviendas, alrededor de 185 personas trasladadas a un albergue temporal, cinco bomberos y una policía lesionados: Marcos Santiago, Arat Feregrino, Víctor Ruiz, Alberto Swindall, Ignacio Álvarez y Ana Elizabeth Bocanegra.
Ana Elizabeth Bocanegra tenía 25 años en el momento del suceso, empezaba su carrera policial y su vida. Quería ser francotiradora. En aquella explosión sufrió quemaduras en el 39% del cuerpo, los miembros que sufrieron el mayor daño fueron sus manos.
¿De quién fue la culpa de la explosión y los daños? En última instancia de las personas que robaban combustible en aquella bodega.
Y es que, de acuerdo con entrevistas a personal que laboró durante mucho tiempo en la policía municipal de San Juan del Río, el protocolo de atención que se siguió aquella madrugada del 26 de enero no fue el indicado. Las corporaciones de seguridad de la localidad no estaban preparadas para estos delitos.
¿Pemex? ¿Qué hizo la empresa federal ante la explosión en la bodega? Deslindarse.
¿De quién fue la culpa de la explosión?, ¿la recuperación de las personas lesionadas?, ¿la persecución del delito?, ¿saber de quién era esa bodega?, ¿el narco? Doña Rosy, vecinos del Barrio de La Cruz y las personas damnificadas seguramente han de tener estas preguntas aun rondando en su cabeza.
Doña Rosy dice que recuerda esto fue hace tiempo, hace ocho años, ellos estaban durmiendo… Pero incluso ahorita, después de tanto tiempo, aún no puedes dormir tranquila… “lo bueno que dicen que no explotó la pipa grande”.
Florentino
–A quien fue mi escolta, a él lo mandaban a resguardar la zona donde estaba el “piquete” con una 38 de revólver (que ve tú a saber si funcionaba, aparte), sin patrulla y él se construyó arriba una casita del árbol para allí resguardar. A esos niveles llegaba San Juan, no saber cómo hacerle –explica Florentino–. Era inútil, porque a parte exponían al policía, ¿qué pasa si hubieran llegado a la carga? Saben que en San Juan, Querétaro, si pasaran asesinatos a oficiales de policía se “calentaría” mucho la plaza, no es la intención de los malosos calentar la plaza a ese nivel. Son acuerdos que tienen. A nadie le conviene.
¿Qué pasaría si hubieran llegado a la carga?
El 12 de agosto del 2020 fue miércoles. Marta supo que la vida de Víctor, su familiar, corría peligro. Víctor, que trabajaba como elemento en la Subdirección Salvaguardia Estratégica de Pemex, había recibido numerosas amenazas de agresión, la última de ellas ese mismo día.
Víctor pensando en que debía informar a sus compañeros de trabajo lo que sucedía, decidió presentarse a laborar el jueves, a pesar del peligro inminente en el que se encontraba. Para que se quedara tranquila, le dijo a Marta que le avisaría también a su nuevo jefe. Marta al ver una nota periodística al día siguiente, creyó que Víctor sí había expuesto la amenaza de agresión y todo estaría bien.
El jefe de Víctor, aun así, decidió ordenar el patrullaje.
Eran aproximadamente las 22:45 horas cuando Víctor junto a sus tres compañeros iniciaron en una camioneta el recorrido por las inmediaciones de la comunidad sanjuanense de Cazadero, casi en los límites entre San Juan del Río, Querétaro, y Polotitlán, Estado de México.
Cazadero, de acuerdo con la revisión que hizo la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), debía ser identificada como zona de riesgo. Pero para los mandos de Pemex, los jefes de Víctor, no era así; incluso no lo fue tras la muerte de los cuatro elementos, lo que según la propia CNDH fue una contradicción de la paraestatal.
Aquella noche, a Víctor y sus compañeros se les informó que el acompañamiento de la Guardia Nacional, quien debe colaborar en los patrullajes al ser una zona de riesgo, llegaría hasta la media noche por la supuesta “carga de trabajo” que presentaba.
Así hicieron el recorrido. Solos. Pero a las 23:45 horas, sujetos armados, en inmediaciones de los ductos, empezaron a disparar contra los elementos de Pemex; Víctor y sus compañeros detuvieron el vehículo en el que se transportaban y, es aquí donde también se apagó la cámara de video con la que contaba la camioneta de la petrolera, la cual debía haber guardado evidencias de los hechos.
El jueves 13 de agosto del 2020, en la comunidad de Cazadero, Víctor y sus tres compañeros fueron asesinados por disparos de diversas armas de fuego de uso exclusivo del ejército, encontrándose en el lugar de los hechos 402 casquillos percutidos.
Florentino
–Fue en 2021, la desaparición de un mecánico que conviviendo con algunos amigos se fue a Cazadero, a dejar a otro amigo y jamás regresó. Se presume que está vinculado al huachicol.
La última vez que yo fui a trabajar a Cazadero fue el año pasado, 2023, una persona me dijo: “Mire, venga, ese niño salió el año pasado, ese hace dos años; están halconeando”. Hasta la primaria no los tocan, pero ingresando a la secundaria se vuelven halcones del huachicol.
Hoy Cazadero desde que uno ingresa a la comunidad hasta que uno se va, está uno vigilado. El caso de este amigo que fue a dejar a su compañero, pues fue uno de esos.
2023, el año con más tomas clandestinas localizadas en la historia de Querétaro
Según información de Pemex obtenida a través de Transparencia, tan sólo en 2023, las 468 tomas localizadas en Querétaro causaron un daño al erario por 25 millones 473 mil 076 pesos con 20 centavos.
Con lo que desembolzó el gobierno federal en 2023 para inhabilitar tomas que grupos de huachicoleros perforaron para sustraer gasolinas en Querétaro, se pudo haber pagado la beca Benito Juárez por todo el año para todos los estudiantes de Bachillerato en Pedro Escobedo.
Desde 2018 y hasta enero de 2024, por inhabilitar tomas clandestinas en Querétaro, el gobierno federal se ha gastado 86 millones 994 mil 194 pesos con 9 centavos, en mil 823 tomas localizadas.
Esto sin considerar la cifra negra que no obra en los datos de Pemex, ya que para que una toma clandestina sea registrada, debe haber una denuncia y carpeta.
De esta manera, el año 2023 ha representado cifras históricas para el estado, ya que el año pasado fue donde más tomas clandestinas se aseguraron por Pemex en Querétaro durante la última década.
Entre 2021 y 2023, en Pedro Escobedo aumentaron 287% las tomas clandestinas. Por su parte, desde 2021 las tomas clandestinas prácticamente duplicaron sus números en San Juan del Río, al pasar de 117 a 211.
En promedio, en 2023 en Querétaro se aseguró una toma clandestina cada 18 horas con 42 minutos.
Florentino
–¿Cómo llega un policía a estar dentro del entramado del huachicol? Hay invitaciones directas, definitivamente no es una cosa que se busque. Hay amigos policías de Corregidora que han sido hasta la fecha presionados, presionados, presionados… y entre lo que se ofrece, entre las amenazas para sus familias, es como llegan a estar.
En Pedro Escobedo –continúa Florentino– en el 2013, Ernesto Perrusquía quien hoy es el segundo a bordo de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de Querétaro (SSC), colega cercano, entra a Pedro Escobedo y encuentra ya un batidero de policías que estaban dentro de la organización del huachicol, y ya Pedro Escobedo tiene también mucho tiempo con eso.
Entre 2014 y 2017 en Querétaro se trazaron rutas por Pedro Escobedo con complacencia de la policía estatal y municipal para el robo de huachicol –revela Florentino.
De cuando sólo había chupaductos y entonces llegó el huachicol a Querétaro
¿Cuál se puede marcar como el inicio del robo de combustibles en Querétaro?, si es que eso es posible. Durante la primera década de los 2000, de acuerdo con periodistas que llevan años cubriendo temas de seguridad en el municipio de San Juan del Río, se caracterizó por una tranquilidad en el tema de huachicol, es para 2010 donde se podría señalar un inicio.
Gracias a información recabada por CartoCrítica, se sabe que por Querétaro atraviesan ductos de Pemex, de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), así como algunos ductos promovidos por empresas privadas. En los cuales se transporta gas natural y gas LP (gasoductos), petróleo crudo (poliductos y oleoductos), diésel, gasolina e hidrocarburo.
Específicamente, toda esta infraestructura pasa por los municipios de San Juan del Río, Pedro Escobedo, Huimilpan, Querétaro capital, El Marqués y Corregidora (los últimos tres colindan con Guanajuato). Los municipios queretanos han sido por las características de su infraestructura vial -autopistas y carreteras que conectan con varios estados- un botín para grupos de la delincuencia organizada.
Es así que, si se trata de profundizar a los inicios del robo de combustibles en Querétaro, se puede remitir a 2013, cuando Pemex señala el aseguramiento de 125 mil 536 litros de diésel en San Juan del Río, la cifra más alta de la que se tiene registro en datos de la paraestatal.
De este 2013, del aseguramiento de los más de 125 mil litros, la prensa local empezó a mostrarlos como hallazgos y detenciones de “chupaductos”.
Por ejemplo, el diario local “El Sol de San Juan del Río” mostraría en sus páginas que, en 2013 hubo en sólo tres aseguramientos la detención de tres pipas cargadas con combustible sustraído en San Juan del Río.
Los materiales periodísticos resaltan además que entonces por $5,000 (cinco mil pesos mexicanos) se contrataba a una persona que conduciría la pipa y se le daban indicaciones para llegar a la comunidad de Loma Linda, ya en el destino se le indicaba ir por otra persona al estado de Hidalgo, regresarían ambas personas al primer destino y estacionaban el tracto en unas cachimbas (chozas al pie de la carretera) con las llaves pegadas, y se trasladaban rumbo a Ciudad de México mientras eran monitoreados e instruidos de dónde detenerse.
La prensa también da cuenta del vínculo existente entre policías municipales en activo de municipios como Corregidora y Pedro Escobedo que, a inicios del año 2013, fueron destituidos por narcomenudeo y daños contra Pemex.
Florentino
–Hoy, nosotros tenemos informes que cada vez se acrecienta más el número de jóvenes captados para estos delitos y la edad disminuye cada vez más. Y por otro lado el pueblo cada vez sabe más, calla más y vive con más miedo.
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