Tras el asesinato de dos policías municipales en Jardines de Aragón, ocurrido mientras presuntamente custodiaban a un líder criminal, la Secretaría de Seguridad Pública Municipal (SSPM) busca endurecer la supervisión sobre las actividades de sus elementos, incluso fuera de servicio.
Así lo dio a conocer, César Omar Muñoz Morales, titular de la corporación policia, luego de la reunión de la Mesa de Seguridad, en donde participan integrantes de diferentes instancias de los tres niveles de gobierno.
El funcionario informó que trabajan de manera conjunta con la Fiscalía General del Estado (FGE) para esclarecer las circunstancias en las que ocurrieron los hechos, así como la carpeta de investigación sigue abierta, donde se analizará minuciosamente qué hacían los oficiales en ese lugar y en ese momento.

César Omar Muñoz Morales, secretario de la SSPM / Foto: Galería
“Estamos trabajando en conjunto con la Fiscalía del Estado para resolver qué estaban haciendo ese día y en ese momento. Tenemos toda la disposición para que se realice una correcta investigación”, afirmó.
Aunque el funcionario advirtió que no es posible supervisar en todo momento lo que hacen los agentes en su vida privada, aseguró que la Policía Municipal mantiene un sistema permanente de evaluaciones, controles y revisiones de confianza para todos sus integrantes.
Muñoz Morales explicó que estas medidas no se implementaron únicamente por este caso sino que se trata de acciones que forman parte de la operación regular de la corporación desde hace años.
Señaló que la supervisión también incluye el monitoreo de actividades personales cuando sea posible, sobre todo en situaciones que puedan poner en riesgo la integridad institucional o generar sospechas, luego de que el compromiso como servidores públicos es respetar el trabajo que realizan.
En este sentido, el jefe policiaco reconoció que algunos elementos desempeñan empleos adicionales fuera de su horario, como conductores de plataformas de transporte, lo que en sí no representa una falta, siempre y cuando no se contravengan las normas internas.
Sin embargo, el caso ha generado cuestionamientos sobre la posible colusión de policías con grupos delictivos, por lo que la SSPM reiteró que colaborará plenamente con la FGE para esclarecer los hechos y deslindar responsabilidades.
Mientras la investigación avanza para esclarecer si los oficiales actuaban dentro o fuera de sus funciones, la SSPM enfrenta el reto de reforzar sus controles internos y recuperar la credibilidad en una ciudad donde la seguridad depende, en gran medida, de la integridad de quienes la protegen.