Pese a que la practica de alguna religión en México es libre, las personas privadas de la libertad que se encuentran al interior de los centros penitenciarios en estado de Chihuahua, “oficialmente” solo se permiten las afines al catolicismo y cristianismo. Además, estas prácticas son reguladas por las autoridades.
Jorge Armendáriz, director de Comunicación Social de la Secretaría de Seguridad Pública Estatal (SSPE), explicó que a pesar de que existen cultos religiosos permitidos dentro de los penales, estos requieren ciertas regulaciones, para garantizar la seguridad y la convivencia pacífica de los reclusos que cumplen condena por delitos cometidos.
Indicó que, en el caso del Centro Penitenciario de Guachochi, ubicado en la zona serrana, los reclusos llevan a cabo prácticas religiosas de acuerdo con sus deidades, siempre bajo una regulación necesaria.
Mencionó que particularmente en esta zona, algunos de los reclusos suelen realizar danzas y cantos, así como utilizan indumentaria típica del pueblo rarámuri.
Aunque en el interior de los centros urbanos, como es el caso del CERESO 3 en Ciudad Juárez, existe una capilla donde se permite la oración y la formación de grupos religiosos, siempre y cuando estas actividades no amenacen la convivencia en los centros penitenciarios ni fomenten la apología del delito.
El vocero especificó que solo se permiten las religiones reguladas por el gobierno federal, como el catolicismo y el cristianismo, dentro de los centros penitenciarios.
Mientras que los cultos sectarios, como el de la Santa Muerte y otras actividades de esta naturaleza, no están autorizados, así como tampoco ningún objeto ni culto dentro de las instalaciones carcelarias.
Durante la entrevista Armendáriz enfatizó que durante las revisiones realizadas dentro de los centros penitenciarios del estado se han decomisado objetos relacionados con cultos religiosos no regulados.
Dijo que, en una de las últimas intervenciones, que tuvo lugar a principios de agosto, se incautaron más de 340 objetos no autorizados. Entre las principales características de estos objetos se encontraban cuadros, dijes y fotografías de la Santa Muerte.
Pero también han encontrado imágenes de Jesús Malverde, considerado el “santo de los narcos”, así como en una ocasión, la fotografía de Joaquín Guzmán Loera, conocido como “El Chapo”, utilizada como si fuera una figura icónica o incluso una figura religiosa por algunos reclusos.
Comentó que, sin embargo, no encontraron elementos relacionados con brujerías durante las revisiones, pero sí hizo mención del gato egipcio localizado durante la primer revisión del año, tras el motín registrado el pasado 1 de enero.