El icónico actor, locutor y comediante Germán Valdés , conocido además como “El Pachuco de Oro”, pasó por varios apodos en Ciudad Juárez antes de adquirir el nombre que lo llevaría a la fama: Tin Tan.
Sin embargo, sería “El Topillo Tapas” el primer pachuco que Tin Tan encarnaría antes de que el comediante mexicano despegara a la fama, platicó Carlos Noriega, locutor nacido y criado en Ciudad Juárez, quien ha dedicado parte de su vida a investigar y compartir la fascinante historia de Germán Valdés “Tin Tan“.
Apodos de la infancia
En las instalaciones de la Sala de Arte “Germán Valdés Tin Tan”, Noriega realizó un recorrido de la vida de Tin Tan y compartió que Tin Tan, antes de convertirse en la estrella de cine, era apodado como “La Chiva“.
La energía inquieta y las travesuras de Tin Tan le valieron este sobrenombre, sin embargo, existen por lo menos tres versiones sobre este apodo, dijo el también locutor Carlos Noriega Mendoza conocido como “El Capi”.
Caracterizado del personaje de Tin Tan, Noriega explicó que la personalidad de Tin Tan era muy inquieta y quienes lo conocían decían que era como “una chiva en una cristalería”.
“El primer apodo que le pusieron aquí en Juárez fue ‘La Chiva’ porque era muy inquieto. Hay varias versiones. Una porque se dejó la barba larga cuando no se usaba en ese tiempo y que parecía chiva. Don Pedro Meneses Hoyos (Fundador de la XEJ y Canal 5) así le puso.
Otra es por cómo jugaba fútbol y era muy bueno, levantaba la pelota con las piernas para atrás y parecía una chiva. La otra es que era muy inquieto y una profesora así le puso porque decía que era ‘como una chiva en una cristalería”.
También quienes eran sus conocidos, sus amigos o allegados solían llamarle “Trompudo” o “Dientón”, haciendo referencia a su prominente boca y dientes, que le conferían una expresión única y reconocible.
Sin embargo, sus amigos más cercanos le decían “Germán”, simplemente Germán”, agregó Noriega Mendoza, lo cual era un reflejo de la cercanía y camaradería con quienes lo rodeaban.
El Topillo Tapas
La trayectoria de Tin Tan estuvo marcada por su ingenio y versatilidad, características que lo convirtieron en un referente del humor mexicano, pero también destacó como locutor de radio en varias estaciones, siendo su participación más destacada en la XEJ, una de las primeras estaciones de radio comerciales de Ciudad Juárez.
En esta estación, Germán Valdés producía sus propios programas y en donde adoptaba personajes para entretener al público, señaló Noriega Mendoza.
“La XEJC fue el punto de partida de Tin Tan como locutor y artista. Aquí, en programas como ‘La Barca de la Ilusión’, Tin Tan desplegaba todo su talento, convirtiéndose en el centro de atención con personajes como Tobías, el marinero pachuco”, expuso.
Es en este periodo en que surge el apodo de “El Topillo“, el cual adquirió durante sus primeros años como comediante y ya caracterizado como pachuco.
Pero el nombre empieza a reconocerse tras su asociación con Paco Miller, un director y productor de renombre en el mundo del espectáculo, cuando Tin Tan se unió a la compañía de Miller.
Noriega Mendoza explicó que durante la Segunda Guerra Mundial, Miller vino a buscar comediantes a Ciudad Juárez para un espectáculo programado en el Teatro Colón en El Paso, Texas y una gira por Estados Unidos, luego de que uno de sus cómicos tuvo que presentarse al servicio militar.
“Arturo Luján le recomienda a Germán y lo va a ver al teatro. Le gusta mucho su trabajo y lo invita, le dice que tenía que tener un nombre y que cómo se iba a llamar. Entonces (Tin Tan) le dice que el pachuco Topillo Tapas, porque es el ‘transa’, es un pachuco tramposo que es una característica de los pachucos”, mencionó.
Noriega Mendoza comentó que a los sombreros que utilizan los pachucos se les dicen “tanditos” o “tapas“, ahí que Tin Tan lo contemplara para su apodo.
Con el apodo de “Topillo Tapas”, un nombre que fusionaba la picardía con la elegancia del mundo del espectáculo, se marcó el comienzo de la de éxitos de Tin Tan. Sin embargo fue un apodo que no convenció del todo a Paco Miller.
“Así se fueron a Estados Unidos a la gira, pero Tin Tan pasó desapercibido porque en Los Ángeles California estaba en plena persecución de los pachucos, entonces la gente no estaba muy de acuerdo con esta cosa de la cultura de los pachucos, había mucha violencia”, dijo.
Tras la poca respuesta del público por el “Topillo Tapas”, Miller decide dejar a Germán Valdés en Ciudad Juárez al concluir con la gira en Estados Unidos, ya que su personaje no funcionó, pues incluso se dice que se reía de sus propios chistes.
Sin embargo, al llegar a la ciudad de Tijuana, el Topillo Tapas se presenta con un “patiño”, caracterizado por Marcelo Chávez, con quien presenta la canción “Watatina” y juntos reciben el apoyo del público.
“Tin Tan pidió un patiño que lo acompañara. Le ponen a Marcelo Chávez, quien tocaba muy bien la guitarra e inventan esta cancioncita Watatitna y es un trancazo. Se van a Guadalajara y vuelven a pegar con esa canción. Tenían tres canciones nomás y la gente se paraba y les pedía que las volvieran a tocar”, añadió.
Después de su colaboración con Marcelo Chávez, la carrera de Germán Valdés comenzó a despegar, ya que el repertorio que creó durante esta gira le brindó el éxito entre sus compañeros y entre la gente.
Tras acabar la gira, Miller decide continuar la colaboración con Valdés, pero le pide como condición cambiarse el nombre por Tin Tan, inspirado en un personaje enanito que acompañaba a un mago llamado Landon, parte del espectáculo que ofrecía la compañía de Miller.
Noriega Mendoza contó que el apodo de Tin Tan no le gustó en un principio a Germán Valdés, y bromeaba con que le dirían “hijo de su campana madre”, pero tiempo después adoptaría el nombre con orgullo, pues en algunas de sus películas llegó a mencionar que era “Tin Tan, porque todo en él era música”.
Cada uno de estos apodos pintorescos contribuyó a forjar la leyenda de Tin Tan, añadiendo capas de profundidad a su personalidad multifacética y que conquistó los corazones de millones de personas en México y más allá.
A pesar de los cambios de nombres que tuvo Germán Valdés a lo largo de su carrera, hoy en día el “Pachuco de Oro” o Tin Tan es un referente en la cultura fronteriza y un símbolo de identidad para Ciudad Juárez, por lo que su legado perdura en las calles de la ciudad y en la memoria de quienes tuvieron el privilegio de verlo actuar en vivo.
Museo de Tin Tan en Ciudad Juárez
Liliana Fimbres, actual coordinadora de la Sala de Arte Germán Valdés, indicó que el museo se encuentra abierto al público desde el 2017, así como presenta diferentes exposiciones, para la promoción de iniciativas culturales.
Destacó que el museo ofrece visitas guiadas gratuitas, donde los visitantes pueden conocer más sobre la vida y obra de Tin Tan, así como sobre la cultura pachuca.
Estas visitas pueden ser conducidas por Fimbres o bien por colaboradores del museo, como es el caso de “El Capi” Noriega, quien ofrece visitas guiadas caracterizado como un auténtico pachuco.
Mencionó que recientemente presentaron la muestra temporal “Lienzo”, la cual celebró el talento de mujeres artistas plásticas, incluyendo a una talentosa niña de 10 años.
También que, además de las exposiciones, la Sala de Arte Germán Valdés ofrece clases gratuitas de tango todos los martes, en un horario de 4:30 a 6 de la tarde y que están abiertas al público en general.
La directora de la sala agregó que el último domingo de cada mes se realiza una clase muestra de tango, donde los alumnos tienen la oportunidad de demostrar lo aprendido y donde se presentan invitados especiales, incluyendo maestros de tango locales e internacionales.
Las personas interesadas en recibir una visita guiada por el museo o conocer más sobre las actividades y eventos pueden solicitar información a través de la página de Facebook de la Sala de Arte Germán Valdés.