A pesar de haber nacido en El Paso, Texas, Alan Hernani Herrera Peña lleva a Ciudad Juárez en la sangre y en el corazón, debido a su crianza en la frontera.
Egresado de la Escuela Nacional de Antropología e Historia (ENAH) y ha dedicado sus días en hacer la historia más accesible al público.
El joven de 22 años se define a sí mismo como un historiador que rompe los esquemas tradicionales, pues busca llevar la historia más allá de los muros académicos.
Para difundir este mensaje, él y varios de sus compañeros historiadores, cofundaron en 2022 un proyecto que llamaron “Laboratorio de Imaginación Histórica”.

El proyecto se enfoca en la divulgación de las ciencias sociales y la historia, más allá del ámbito académico, conectándola con la realidad actual, con el fin de llegar a públicos más amplios.
Alan cuenta que, a través de este proyecto, buscan mostrar que la historia tiene múltiples aplicaciones, más allá de la investigación académica tradicional, pues dicho en sus propias palabras “todo es historia”.
Desde su infancia, Alan estuvo rodeado por una familia inmersa en las ciencias sociales, las artes y las humanidades.
Su madre, socióloga y cantante de ópera. Su padre se dedicó al trabajo social, mientras que la mayoría de sus familiares son docentes.
Aunque inicialmente consideró estudiar física en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), un concurso de historia y la influencia de un profesor lo llevaron a inclinarse por el campo de la Historia.

Sin embargo, conforme avanzaba en su carrera, se dio cuenta que quería romper con el estereotipo de que un historiador debe ser una figura rígida y estricta.
“Que no se nos venda como la única opción y como el único futuro y que, si no te dedicas a eso, eres un fracasado. Al contrario, nosotros queremos cambiar ese paradigma y pensar que la historia tiene una función mucho más amplia”, comenta.
Alan trabaja para promover un enfoque más creativo y flexible, en donde la historia puede combinarse con otras disciplinas y métodos, ofreciendo nuevas formas de entender el pasado y su relación con el presente.
“La historia que no sirve para la vida, no sirve para nada” dice, explicando que ésta debe ser útil para todos.
Un legado en papel
En cuanto a su proceso de investigación y escritura, Alan ha explorado múltiples géneros, lo que lo llevó a escribir la columna “Museo Fronterizo”, en donde aborda temas sobre la vida cultural en Ciudad Juárez.
En esta columna, busca resaltar los proyectos culturales y académicos que se desarrollan en la ciudad, desde el arte y la poesía hasta la biología y el activismo, señala.
Reconoce que, al utilizar este género, es una forma de dejar un registro histórico, es decir, un espacio para documentar lo que ocurre en la comunidad, con la esperanza de que, en el futuro, historiadores y académicos puedan utilizar este material para estudiar la vida cultural de la ciudad.

Uno de los proyectos más personales es el libro “Crónicas del gigante que cargaba un museo”, una obra que mezcla la crónica, la carta y la poesía.
El libro habla de la importancia de la relación con nuestros abuelos, de su rol como figuras esenciales en nuestras vidas, por lo que su objetivo es invitar al lector a reflexionar sobre sus propias historias familiares.
“Para mí, mi abuelo Manuel y mi abuela Yoya, así como todos mis abuelos, representan una riqueza invaluable de amor y sabiduría”, platica Alan.
Así como sobre la relevancia de la historia oral y la preservación de esos relatos que se pierden con el tiempo, en donde trata de capturar la memoria viva, ya que, según Alan, cuando una persona fallece, también se pierden años de experiencias y conocimientos que nos ayudan a entender el presente.

Explica que la estructura del libro se divide en tres partes: el Valle de Juárez como espacio geográfico; la vida de su abuelo desde su infancia hasta su adultez, y el museo como institución.
Aunque no sigue un orden cronológico estricto, sino que va saltando en el tiempo, entre sus memorias de infancia y las vivencias de su abuelo, especialmente sobre cómo llegó al Valle de Juárez como maestro.
“Mi intención inicial fue crear un registro histórico del Museo Regional del Valle de Juárez y de mi abuelo, el profesor Manuel Robles. Quería dar un primer paso y dejar algo tangible, un esfuerzo inicial que pudiera preservar esa historia antes de que algunos recuerdos se desvanecieran”, indica.

Alan comenzó a trabajar en este libro en el 2022, considerándolo inicialmente como un fanzine en la exposición colectiva “Vaivén de Territorios”, organizada en el Museo del Chamizal con jóvenes del Valle de Juárez, donde además participó con un video poema.
“Ese fue el primer borrador del libro, unas hojas grapadas que regalamos durante la exposición”, agrega.
A partir de ahí, decidió llevar el proyecto al siguiente nivel, buscando hacerlo accesible y ágil, especialmente para un público joven, por lo que finalmente fue impreso en julio de este 2024 por Ediciones Arboreto.
Además contó con la colaboración de José Santillanes en la maquetación y corrección. Incluye también dos prólogos de sus colegas historiadores: María Valdez Gutiérrez, de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez y Francisco Peralta Hernández, compañero de generación en la ENAH.
Recorrido por la frontera
Su obra ha sido presentada en la Ciudad de México, en la Escuela Nacional de Antropología e Historia y en el Museo del Telégrafo. Sin embargo, iniciará con una gira este mes para presentarla en diferentes partes.
La próxima presentación es el sábado 12 de octubre a las 6 de la tarde en el “Edificio de los Sueños”, ubicado en la Plaza Cervantina, la primera vez en Ciudad Juárez.
Posteriormente, el 19 de octubre estará en la “Casa Madero” y el 25 de octubre en “Biznaga Lab”.

La última presentación será en el Museo Regional del Valle de Juárez el sábado 23 de noviembre, a las 1 de la tarde, coincidiendo con el aniversario luctuoso del profesor Robles.
“Decidí que fuera hasta el último porque quiero que coincidan más o menos por las fechas del aniversario luctuoso del profe y la conmemoración del Plan de Ayala”, señala.
El libro tiene un costo de 150 pesos y, hasta el momento, sólo se puede adquirir en las presentaciones del libro. Sin embargo, próximamente se anunciarán puntos fijos de venta, a través de las redes sociales del escritor.
Aquí puedes consultar la página de Facebook de Alan Hernani:
https://www.facebook.com/profile.php?id=100008862107488&mibextid=LQQJ4d