Cada dosis de naloxona que llega a manos de la comunidad y luego es devuelta refleja una sobredosis que pudo ser revertida y una vida que pudo salvarse, indicó Julián Rojas Padilla, encargado del proyecto de Reducción de Daños de Programa Compañeros A.C.
Explicó que la naloxona, conocida comercialmente como Narcan, es una herramienta clave para revertir intoxicaciones por opioides como el fentanilo, una droga que ha elevado los casos de muerte por sobredosis en la región.
Por ello, la asociación se ha dedicado los últimos cuatro años a distribuir entre 2 mil y 3 mil dosis de este medicamento en Ciudad Juárez, con el fin de reducir el número de sobredosis en esta frontera.

Señaló que el 80 pro ciento de las dosis distribuidas han sido recuperadas, lo que permite evaluar con precisión el impacto real del programa entre comunidades de alto riesgo.
Sin embargo, indicó que la estrategia no se limita a la entrega del medicamento sino que también incluye acompañamiento, capacitación e información preventiva para las personas usuarias y sus entornos cercanos.
TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR
El objetivo es promover un enfoque más humano, accesible y comunitario ante la crisis de salud pública por el consumo de sustancias, especialmente entre poblaciones vulnerables, señaló Rojas Padilla.
Este modelo de atención directa ha evitado tragedias en cientos de hogares juarenses, además de reducir muertes por sobredosis, por lo que la iniciativa fortalece la conciencia colectiva sobre el valor de la vida y la prevención.
Agregó que el compromiso de Programa Compañeros A.C. se refleja en una red de apoyo que actúa donde pocas instituciones llegan, demostrando que la salud comunitaria puede salvar vidas, una dosis a la vez.