En medio del ajetreo cotidiano de la Avenida López Mateos, frente al icónico McDonald’s Triunfo, hay un guardia que parece salido de una película de Western.
Antonio Francisco Castro Chávez, mejor conocido como “El Sheriff”, no solo resguarda el lugar, sino que también roba miradas con su imponente presencia: texana, gafas estilo aviador, botas, gabardina vaquera y un cigarro que fuma con el mismo estilo que Clint Eastwood.

El domingo pasado, “El Sheriff” está de manteles largos, celebrando su cumpleaños número 75 con la misma elegancia que lo caracteriza.

Nacido el 26 de enero de 1950 en Monterrey, Nuevo León, Castro lleva 32 años viviendo en Ciudad Juárez y 15 de ellos como guardia de seguridad en este restaurante.
Pero más allá de ser un personaje pintoresco, “El Sheriff” tiene una historia de vida que refleja fuerza y resiliencia.

Café en mano relata que hace años, tuvo una agencia de seguridad exitosa, pero un trágico secuestro que involucró a su hijo lo dejó “en la calle”. Aunque prefiere no hablar mucho de esa etapa, dice que su vestimenta y su trabajo son una forma de honrar la vida y mantenerse firme.

VIGILA MCDONALDS … PERO ROBA MIRADAS
A primera vista, su imponente figura y aire serio pueden intimidar, pero basta cruzar unas palabras con él para descubrir a un hombre cálido y conversador.
Castro es amante del café y fue precisamente una taza de café en el McDonald’s lo que cambió su vida: tras ayudar a resolver un incidente de emergencia, la gerente de la plaza lo contrató como guardia.

Desde entonces, no ha faltado un solo día al trabajo, siempre vestido con su característico atuendo vaquero.
¿QUÉ LE DICE LA GENTE SOBRE SU APARIENCIA?
“Es malo hablar de uno, pero la gente me ha dicho que intimido, pero que al mismo tiempo les doy seguridad. Me piden fotos, platico con extranjeros, con niños… y aunque algunos me dicen que no me darán dinero porque ‘ando mejor vestido que ellos’, otros me dicen ‘mejor le doy 100 pesos porque se ve respetable’”, comenta Castro modesto y un poco apenado entre risas.
Este alguacil urbano también está capacitado en seguridad y le gusta compartir sus conocimientos, lo que muestra el acervo y experiencia que tiene en su trayectoria.
“Su presencia impone y nos hace sentir seguros”
SÍMBOLO DE SEGURIDAD EN MC DONALDS
Muchos clientes aseguran que si no ven a “El Sheriff” en la entrada del McDonald’s, prefieren no entrar. “Su presencia impone y nos hace sentir seguros”, dicen.

HBD AL SHERIF URBANO
Para Castro, ser guardia es más que un trabajo, es un compromiso con las personas. Hoy, al cumplir 75 años, Antonio agradece el respeto de quienes lo rodean y asegura que seguirá al pie del cañón.

Su vestimenta, inspirada en las películas de Western y series como Bonanza, no es solo un estilo, es parte de su esencia. “Siempre he vestido así, desde niño. En una foto que tengo con mi mamá, traigo un short y botas”, cuenta con orgullo.
TRADICIÓN Y SEGURIDAD
La figura de “El Sheriff” es un recordatorio de que incluso en la modernidad de una ciudad fronteriza como Juárez, el espíritu del viejo oeste puede mantenerse vivo, personificado en este entrañable guardia que no solo cuida la entrada de un McDonald’s, sino que resguarda la tradición, la seguridad y el respeto en su comunidad.

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