Pese a que el 85 por ciento de la contaminación en Juárez proviene del transporte, incluidos vehículos particulares, el sistema de transporte público Juárez Bus, omite la verificación ecológica, incumpliendo la normativa estatal.
César René Díaz Gutiérrez, titular de la Dirección de Ecología del Municipio, refirió que los vehículos contaminantes se entiende por todo el parque vehícular, como automóviles particulares, plataformas de transporte, camiones de carga y transporte público.

El funcionario refirió que la principal fuente de contaminación en la ciudad son las partículas en el aire generadas por los vehículos al circular, de acuerdo con estudios realizados en colaboración con la cuenca atmosférica de Texas, Nuevo México y Chihuahua.
Comentó que la contaminación en Juárez se debe a los hidrocarburos y al polvo que levantan los automotores al circular, y que la situación se agrava con los fuertes vientos, pues las partículas en el aire alcanzan niveles por encima de los 100 puntos en el Índice Metropolitano de la Calidad del Aire (Imeca).
“La ciudad tiene más problema en partículas por los vehículos que por la industria. No hay una refinería ni una empresa que emita grandes cantidades de contaminantes, como en otras ciudades”, explicó Díaz Gutiérrez.
Falta de verificación en Juárez Bus
Díaz Gutiérrez señaló que una de las problemáticas también reside en la omisión estatal para la verificación de emisiones contamintantes de las unidades de transporte del Juárez Bus, conocido anteriormente como ViveBús, incluidas las rutas alimentadoras.
“La misma Ley de Transporte del Estado de Chihuahua establece que todos los vehículos deben someterse a verificación, pero las unidades de Juárez Bus no lo hacen”, indicó.
Dijo que las explicaciones que se les han dado para evadir la verificación ecológica de las unidades es que se trata de camiones nuevos, sin embargo, todos los vehículos que utilicen gasolina, diésel o gas natural, deberán somentarse a la verificación.

En este sentido, refirió que los únicos vehículos que no contaminan pues son los eléctricos, por lo que son quienes estarán exentos de alguna verificación, aunque no es el caso del sistema del Juárez Bus.
Díaz Gutiérrez señaló que el artículo 98, fracción 23 de la Ley de Transporte obliga a que las unidades de transporte público realicen controles periódicos de emisiones contaminantes, a lo cual, el Estado ha sido omiso.
El director de Ecología adelantó que buscará un acercamiento con las autoridades estatales para que el sistema de transporte cumpla con la normativa.
Además, hizo un llamado a los concesionarios del transporte público para que realicen la verificación vehicular, pese a que actualmente no es un requisito para obtener su permiso de circulación.

Recordó que esta situación es una problemática que persiste desde hace años, pues las unidades de transporte circulan por la ciudad sin controles ambientales.
Las rutas alimentadoras del Juárez Bus, que incluyen unidades más antiguas, tampoco están sujetas a verificación, pero esta omisión genera dudas sobre el impacto ambiental de estos vehículos, que al ser más viejos pueden emitir niveles más altos de contaminantes.
Díaz Gutiérrez enfatizó que el problema de la contaminación no solo afecta la calidad del aire, sino también la salud de los juarenses.
Así como la exposición prolongada a partículas contaminantes puede agravar enfermedades respiratorias como asma y bronquitis, además de incrementar el riesgo de problemas cardiovasculares.
“Es una situación que debe atenderse con urgencia, porque la contaminación del aire tiene consecuencias directas en la salud de la población”, alertó.
Recordó que Ciudad Juárez es el único municipio del estado que cumple con un programa de verificación vehicular desde 1996, debido a los tratados internacionales de monitoreo ambiental en la frontera con Estados Unidos.
Sin embargo, insistió en que es necesario reforzar las medidas de control para reducir los niveles de contaminación y exigir el cumplimiento de la ley a todos los sectores del transporte.